Nace en Barcelona el año 2000 y ya de pequeña recuerda fascinarse con la habilidad de dibujo del padre. La posibilidad de crear espacios únicos y libres con la humildad de un lápiz y un papel.

En 2016 cursa el bachillerato artístico. Durante esta época muere la madre de un cáncer y establece un relato íntimo con el dolor y la percepción de uno mismo en plena adolescencia.

Al salir del bachillerato sigue con la convicción de querer extender un diálogo social a través del dibujo, el espacio seguro donde se entiende a sí misma. Estudia un Grado Superior de Formación Profesional en la EASD Pau Gargallo. En 2020 cursa sus prácticas empresariales en el taller de grabado y pintura La Madriguera, dirigido por Paula Bonet, donde trabaja en gestiones del taller e impartiendo clases de grabado.

El mismo año, accede a los estudios en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona, ​​mientras sigue trabajando en desarrollar su obra.

Su obra explora, a través de retratos, los rincones más íntimos de la vida. Sus dibujos a lápiz le permiten, a través del trazo, convertir el papel en un escenario de debate donde encontrar respuestas, pero, sobre todo, encontrar nuevas preguntas. Las imágenes de cuerpos con detalles de color vislumbran un discurso de revisión constante, un lugar donde, en centrar la mirada en un tercero, se clarifican las preguntas sobre uno mismo. El dolor y las ausencias son temas recurrentes en su obra, además de la salud mental, el feminismo y otros temas sociales.